Gracias, también, a los APs

En estos días complicados identificamos unas tareas y profesionales imprescindibles para mantener el pulso en un país detenido por el confinamiento. Desde luego, los sanitarios en la primera línea pero, también, el personal de los supermercados, transporte público, farmacéuticas, medios de comunicación,… Gracias a todos ellos por sostener el país en estos días.

Y de forma especial, desde el Foro de Vida Independiente y Divertad (FVID), queremos hacer llegar un mensaje de apoyo y agradecimiento a todas las y los asistentes personales que están viniendo a trabajar con normalidad a nuestras casas para realizar su trabajo. Lo que permite que las personas con diversidad funcional podamos cubrir lo fundamental, desde los aspectos más básicos a seguir con nuestra actividad diaria, aunque sea en confinamiento.

Son momentos difíciles y reconocernos y valoramos la responsabilidad y el esfuerzo que supone para todas ellas. A pesar de que son las olvidadas por las administraciones y medios de comunicación porque nunca se nombran.

Asimismo agradecer el trabajo que siguen realizando las Oficinas de Vida Independiente (OVIs), en la gestión de la asistencia personal.

Igualmente queremos hacer extensible el agradecimiento a todas las personas, mayoritariamente mujeres, que trabajan en la ayuda a domicilio y el cuidado y apoyo de personas mayores.

Hacemos un llamamiento a las Administraciones para que suministren a estos profesionales los equipos de protección necesarios para que puedan desarrollar sus tareas

Desde el FVID ponemos de manifiesto que la asistencia personal y la vida independiente, una vez más, es la mejor opción para las personas con diversidad funcional, que les permite mantenerse en casa y cubrir sus necesidades fundamentales y continuar sus actividades diarias impuestas por el confinamiento y prevenir cualquier contagio, seguimos observando una falta de reconocimiento hacia la vida independiente.

Desde el Movimiento de vida independiente en España apreciamos y observamos que existe un olvido y falta de reconocimiento hacia la vida independiente y la asistencia personal y a las personas que llevan a cabo este trabajo desde todos los ámbitos de la sociedad. También en estos momentos difíciles de alarma sanitaria.